Penitente Hermandad de Jesús Yacente
El acto cumbre de toda la Semana Santa zamorana, la noche del Jueves al Viernes en la que la tradición dice que la ciudad no duerme. Un coro de 200 voces eleva el cántico basado en el Salmo 50 de la Biblia, al que puso música el padre José María Alcácer. La culminación de la procesión, que sale de la iglesia de Santa María la Nueva, tiene lugar en la plaza de Viriato, la cual van rodeando los hermanos. El coro arranca a cantar cuando el Cristo hace su entrada, iluminado únicamente por la luz de los hermanos. Un momento único, aunque el recorrido por las viejas calles del casco antiguo presta momentos de igual belleza.