Cristo de la Buena Muerte
Cristo de la Buena Muerte, obra de Juan Ruiz de Zumeta, del siglo XVI, uno de los mejores crucificados de la Semana Santa zamorana, que en origen estaba destinado al antiguo convento de los franciscanos, situado en la actual plaza de la Marina. Tras la Desamortización se trasladó a la iglesia de Santiago del Burgo y ya en 1945, a San Vicente. Desfila en andas y es portado en horizontal, “a la altura de los corazones” por seis hermanos. Va iluminado por teas y el paso lo marcan el toque de tambores.