SantÃsima Resurrección
En la Plaza Mayor se reúne la Virgen con el Resucitado. Allí se celebra el ‘Encuentro’, entre una súbita explosión de alegría, tiros de escopeta con salvas desde los balcones (lo que algunos han relacionado con las antiguas suizas o ‘zuizas’, manera de gastar el dinero sobrante en pólvora), y tras efectuar la Reverencia, se sigue por Balborraz y La Plata hasta realizar su entrada en el templo de salida. Al finalizar la procesión se celebra misa mayor y tras ésta los mayordomos del año convidan a las autoridades, cofrades y resto del barrio donde se asienta la cofradía a un refrigerio de frutos secos, pastas y bebidas. Tras lo cual, es acostumbrado acudir a uno de los numerosos bares y restaurantes zamoranos a degustar el plato típico del día, consistente en dos huevos con pan fritos, más una carne magra de cerdo, escoltados de dos torrijas: el famoso ‘dos y pingada’. La mayor parte del recorrido se desarrolla por calles típicas, la antigua Puebla del Valle del medievo, lugar donde se asentaban la mayoría de los gremios artesanales y que aún en la actualidad conserva reminiscencias de aquel pasado medieval: casas bajas y calles empedradas.