Aguirre pierde para Segovia a Jacobo Trigo y a Prada

P. Antúnez

Regresan las semanas con contratiempos en la plantilla del Zamora Club de Fútbol. Si para afrontar el encuentro del sábado en «Ipurúa», el técnico rojiblanco, Roberto Aguirre, no pudo disponer de Fran González debido a una lesión en el abductor largo de su pierna derecha, para el compromiso que este miércoles le espera en tierras segovianas ante la Gimnástica (20.00 h.), el cuadro zamorano tendrá las bajas de Jacobo Trigo y de Alberto Prada.


El centrocampista tuvo que pedir el cambio en el minuto 72 del encuentro ante el Eibar ya que notó algunas molestias en el abductor, problemas físicos que ayer le impidieron entrenar y de los que pasará revisión médica en las próximas horas para ver el alcance de su lesión. Durante la sesión de ayer Aguirre manifestaba que «pidió el cambio porque no podía seguir. Espero que no tenga rotura pero seguro que el miércoles no va a poder jugar», refiriéndose a la lesión que ha sufrido uno de los fijos en el once inicial como es Jacobo Trigo.


Por su parte, Alberto Prada, que era uno de los seis hombres que estaba al borde de la sanción al tener acumuladas cuatro cartulinas amarillas, frente a los eibarreses vio la quinta tarjeta que le llevará a cumplir un encuentro de castigo frente a la Segoviana. De esta manera, Aguirre volverá a tener que hacer variantes en un once inicial en el que ante el Eibar sorprendió la presencia tanto de Miguel Santos como de Marín en ambos extremos en detrimento de Jairo Álvarez y de Juanra que saltaron al campo en el transcurso de la segunda mitad.


Todavía son cinco los jugadores que están al borde de la sanción y que se encuentran a una cartulina para cumplir un partido como son Garretas, Manu Arias, Jacobo Trigo, Marín y Jairo Álvarez. Así las cosas, Aguirre es consciente que en las próximas jornadas seguirá teniendo alguna que otra baja por este motivo y en el horizonte está el encuentro del próximo domingo ante un recién ascendido a la categoría como es el Amorebieta, un equipo que lleva encaramado en los puestos de cabeza desde el inicio de la Liga y que se resiste a caer de ellos en su lucha por acabar zona de «play-off» de ascenso en la que también se encuentran Mirandés, Eibar y Ponferradina, y a la que intentan llegar Alavés, Guijuelo y Sestao.


Después del largo desplazamiento a Eibar y tras llegar pasada la media noche a Zamora, en la matinal de ayer el cuadro rojiblanco realizó el típico entrenamiento de recuperación a las órdenes de Aguirre. Fue una sesión en la que ni Fran ni Jacobo saltaron al terreno de juego, quedándose en el vestuario recibiendo las debidas atenciones del fisioterapeuta Pedro Lucas, de los problemas que ambas tienen en los abductores, lesiones que les van a impedir a ambos jugar el próximo encuentro frente a la  Segoviana. El resto de jugadores se limitó a realizar carrera continua par acto seguido entrar al gimnasio y hacer el trabajo de estiramiento junto al preparador físico Diego Santos; mientras tanto, los guardametas Miguel y Luceño y los también canteranos Hugo  y Dani Hernández que no participaron en el partido ante el Eibar, llevaron a cabo un entrenamiento algo más intenso con carreras en progresión y partidos de fútbol-tenis.


El plantel rojiblanco, al estar ante una semana con encuentro el miércoles, no tendrá el habitual día de descanso y Aguirre tiene convocados a sus hombres hoy a las 10.30 h. en el vestuario del «Ruta » para afrontar una nueva sesión en la que se profundizará algo más en la preparación del compromiso ante una Segoviana que tiene el agua al cuello y que no se puede permitir lujos en su lucha por abandonar unos puestos de descenso en los que se encuentra tan sólo con 24  puntos y en los que también están el Lemona, Burgos y Palencia, siendo la promoción para una Arandina a la que el Zamora aventaja en siete puntos y el gol-average.