
Óscar Furones
Gustavo Pérez Segura, guardameta toledano de 34 años se convirtió ayer en el flamante fichaje del Euronics-Fisiolife-Moralejo Fútbol Sala Zamora para su regreso a la Segunda División.
Gus, como es conocido deportivamente, vivirá de esta manera su segunda etapa en Zamora, puesto que ya es un viejo conocido de la afición, debido a que militó en sus filas en la campaña 2009-2010, cuando el equipo jugó en División de Honor.
Un guardameta veterano y con amplia experiencia, comenzó jugando en el Ocaña. Posteriormente militó en las filas del Gestesa Guadalajara, para luego dar el salto a Pinto. Tras su etapa en el conjunto madrileño, el guardameta se incorporó al Fútbol Sala Zamora que en ese momento había vivido el mayor hito de su historia, y tras una temporada para enmarcar había conseguido el ascenso a División de Honor. En Zamora estuvo durante una sola temporada para luego hacer las maletas y fichar por el Benicarló, aunque tras los problemas y desaparición de éstos decidió enrolarse en las filas del Peñíscola Bodegas Dunviro donde estuvo hasta esta temporada.
Pero desde hace unas semanas y gracias a la situación personal del guardameta, muy ligada a la capital del Duero, el Euronics Fisiolife Moralejo Selección de fútbol sala se ha podido hacer con los servicios de Gus. Su palmarés está compuesto por dos ascensos a División de Honor y una liga de División de Plata. A la hora de hablar sobre su fichaje Gus declaró "sentirse encantado de volver a Zamora. En mi anterior etapa estuve muy a gusto en la ciudad y con el club, y creo que ahora mismo se están poniendo los cimientos para hacer un buen proyecto a medio plazo". Además se refirió a los objetivos del club ya que "hoy por hoy la Segunda División es tremendamente competitiva por lo que tenemos que ser cautos y tener los pies en el suelo, vamos a ser un equipo muy joven y recién ascendido y eso hará que los rivales vengan muy motivados. Nosotros tenemos que trabajar muy duro para no pagar la novatada y conseguir la permanencia sin pasar apuros".