ZAMORANOS EN EL MUNDO - HEMEROTECA

De sólida raíz sayaguesa

Néstor Seijas con su esposa, en el Centro Zamorano de Buenos Aires.

Néstor Seijas Martín mantiene el apego con Almeida, la tierra de sus abuelos maternos, desde la vicepresidencia del Centro Zamorano de Buenos Aires

23.01.2015 | 11:01

B. Blanco García

Una emigración de ida y vuelta fue la que vivió el matrimonio formado por Isidro Martín Álvarez y Teresa Nicolás de la Iglesia, de Almeida de Sayago. Primero a Cuba, donde instalaron un pequeño negocio de dulces, y, tras el regreso por la depresión de su mujer al sentir tan lejos a su familia, a Argentina, para reunirse con sus hermanos, allí instalados, donde volvieron a comenzar de cero con un comercio de almacén y charcutería. 

 Su nieto, Néstor Seijas, ha sabido mantener ese amor por la tierra de sus antepasados desde la vicepresidencia del Centro Zamorano de Buenos Aires, a pesar de que no pudo conocer a sus abuelos. "Mi abuelo murió nueva días después de que yo naciera, pero gracias a mi madre y a muchos paisanos, fue sabiendo de su gran personalidad, de su esmero en la educación de sus hijos, a los que tuvo que sacar adelante solo debido a la enfermedad de su esposa, y de su tesón y sacrificio, como tantos zamoranos que han llegado a estas tierras", valora.

 El apego por Almeida se lo supo transmitir su madre Martina. "Aunque nunca pudo volver, en sus relatos, que seguramente los había escuchado en boca de su padre, su madrina y sus tías, hablaba de su pueblo como si lo hubiera recorrido, cuando en realidad partió de allí con solo dos años", rememora. "Ella fue sin duda alguna quien me inculcó el amor que siempre sentí y siento por España, por Zamora y, por supuesto, por el querido pueblo de Almeida", apunta.

 Esos relatos maternos fueron los que le empujaron, en 2007, a viajar a Zamora junto a su mujer para conocer Sayago, después de haber solicitado la ciudadanía española. "Cuando volvíamos, apenas sentado en el avión, le dije a mi esposa que cuando llegáramos a Buenos Aires me iba a asociar al Centro Zamorano, al que le estaba muy agradecido por el asesoramiento recibido para lograr esa doble nacionalidad", reconoce este hijo, nieto y biznieto de sayagueses.

 Aunque el Centro Zamorano de Buenos Aires siempre estuvo presente en las conversaciones familiares cuando era pequeño, sus padres nunca se acercaron, "seguramente porque estaba alejado de casa y por las obligaciones laborales", argumenta Néstor Seijas.

 "Comencé a frecuentar el centro tras mi viaje a España, a disfrutar de sus fiestas, a conocer linda gente y a integrarme, poco a poco, hasta que un día me invitaron a ser parte de la directiva, después de haber sido elegido presidente Ángel Llamas", recuerda. El gusanillo del asociacionismo le viene de su abuelo Isidro, ya que en su etapa de Cuba fue socio fundador del Centro Zamorano en la isla, en 1916, según descubrió. "He llegado a la vicepresidencia después de varios años de haber integrado la comisión directiva y a propuesta de mis queridos amigos Florencia Calvo, la actual presidenta, y de Alfredo Miranda, secretario e hijo de uno de los grandes presidentes anteriores", agradece.

  De momento, Seijas ha tenido "la suerte" de visitar dos veces Almeida de Sayago, la tierra en la nació su madre, sus abuelos, bisabuelos y tatarabuelos maternos. Un viaje que piensa repetir en cuanto pueda "porque amo entrañablemente el pueblo de mis mayores", se sincera.