La gestora logra que la plantilla retire las denuncias

Manuel López-Sueiras

El Zamora CF vivió, después de varios años, una asamblea de socios tranquila gracias a la maniobra de última hora de la junta gestora que consiguió en la mañana de ayer que todos los jugadores retirasen sus denuncias por impagos tras aceptar los pagarés que el club les ofreció a cuenta de los 125.000 euros depositados como aval. La directiva que presidió Isaac Macías se despidió ayer de los socios en una asamblea general que fue una balsa de aceite y en la que el vicepresidente Luis Martín Uña anunció un «supuesto» recorte de la deuda de 8.000 euros pese a acumular 14.985 euros de déficit en el ejercicio que ayer se cerraba.

Los socios aplaudieron la gestión de los gestores en varias ocasiones durante la asamblea que duró poco más de una hora y en la que no se planteó ni un solo reproche a la gestión de Macías que, por otra parte, en ningún momento descartó de forma definitiva volver a presentarse para seguir llevando las riendas del club.

En todo caso y pese a que en un principio las cuentas puedan calificarse como satisfactorias ante las pesimistas previsiones que se habían planteado, la junta directiva que salga de las elecciones del próximo día 2 de julio tendrá que contar además de con unos 263.000 euros de deuda acumulada en los últimos tres años -tan sólo 14.985 en este último-, con los 125.000 que tendrá que conseguir para volver a poner el aval que le exigirá la AFE y la Federación.

La asamblea tuvo como preludio unas inacabables horas previas en las que la junta directiva echó el resto para conseguir la que era la única solución posible a una situación que, si ahora es muy delicada, podría llegar a convertirse en crítica si se llegase a ejecutar el aval por las denuncias. El directivo Francisco Machado en una primera instancia, y el propio presidente Macías en los casos que se complicaron más, llevaron las negociaciones durante el martes y el miércoles, apremiados por la Comisión Mixta AFE-RFEF que se reunía en la mañana de ayer, y al comienzo de dicha reunión eran todavía dos los jugadores que no habían aceptado la propuesta de la gestora. Esa propuesta pasaba por aceptar un pagaré por el montante de los sueldos adeudados, un pagaré que se cobraría dentro de un mes a cuenta del aval de 125.000 euros que el club tiene en Caja Rural.

Los directivos echaron el resto durante la mañana para intentar convencer a los dos jugadores que no habían aceptado las condiciones. Uno de ellos dio el visto bueno pronto, pero con el otro se tardó bastante más y no fue hasta pasadas las 14.00 horas, y con la reunión a punto de finalizar, cuando se retiraba la última denuncia que quedaba. Este acuerdo permitió a la gestora llegar a la asamblea con el aval intacto para presentar sus cuentas económicas y evitar así la posibilidad de que se incrementase la cantidad a depositar para el próximo ejercicio.

Los ingresos presentados por la gestora fueron finalmente de 678.000 euros, una cantidad que tiene un gran mérito dados los tiempos que corren, mientras los gastos fueron algo superiores (693.000), con lo que el déficit de esta temporada se situó en «solo» 14.985 euros, una cantidad sensiblemente inferior a las de los dos últimos ejercicios, que fue de 110.000 y 141.000.

La deuda hace ahora un año era de 271.000 euros y a día de ayer era de 388.000, aunque cuando se libere el aval se quedará en 263.487 que sería la cantidad con la que tenga que contar la próxima directiva, 8.000 euros inferior a la que existía al final del pasado ejercicio.

En todo caso, los nuevos directivos tendrán que sumar a todo este dinero que en teoría deberán conseguir, los 125.000 del nuevo aval que habrá que depositar dentro de un mes y que será el primer gran escollo que tendrán que salvar en su gestión, una cantidad muy superior a los 70.000 con que partió Maxi Martín al suceder a la gestora de Simón García Taboada.

Isaac Macías inició su intervención ayer ante los socios mostrando su agradecimiento «a los trabajadores del club y a los jugadores que han peleado hasta el final. Ha sido un año complicado y largo y estamos llegando a los últimos momentos de esta junta gestora. La situación es difícil, pero es perfectamente asumible para los que vengan detrás». El presidente de la gestora explicó que «todos los jugadores denunciaron, como es lógico, porque han hecho su trabajo y querían asegurar lo que se les debe. Nosotros hemos estado en contacto permanente con ellos a través de Sergio Sánchez, pero también la AFE nos ha echado una mano aunque tuvo que haber alguna voz para que se descongestionaran las cosas. Se les han entregado pagarés y se ha dado orden de que se paguen en cuanto se levante el aval», explicó a la asamblea.

Macías, respecto al trabajo de la joven plantilla, aseguró que «ha sido un año duro pero el equipo se ha curtido. La base está ahí y yo le pediría al que venga que mire a la cantera. Son casi 300 niños y hay que trabajar con ellos. Este año nuestros jugadores han demostrado que pueden sacar adelante al primer equipo. Se han tenido que bregar, pero al final han hecho valer esa experiencia que han adquirido».

«El Zamora tiene futuro, pero hay que tener paciencia -añadió el presidente de la gestora- porque además tenemos un grupo de técnicos que trabajan con los chicos, no sólo haciéndoles futbolistas, sino también educándolos. Si se sigue esa línea, el club tendrá mucho futuro, pero si se cambia, no duraría más de dos años. Zamora se merece un club de cantera».

Respecto al aval que habrá que volver a poner, Isaac Macías aseguró que, si no hay denuncias, sería ya el último, salvo que la Federación decida suprimirlos antes.

Macías finalizó su intervención ante los socios haciendo un llamamiento a la afición: «Somos 1.300 absolutamente fieles pero entre todos, tenemos que enganchar más gente al club. Debemos dejar de mirar para los lados y sacar el club adelante, porque el Zamora CF no puede ser el juguete de nadie. Son cuarenta y cinco años de historia y eso es muy serio. El legado de Ferrín, Prieto o Antonio de Avila, hay que tener respeto por él. Cuantos menos palos haya en las ruedas, mejor estará el club». En el capítulo de ruegos y preguntas, la gestora explicó que la deuda con Hacienda y la Seguridad Social es cercana a los 60.000 euros aunque se encuentra muy aplazada.

«El Zamora tiene futuro si no es el muñeco de nadie, es una entidad a respetar pero genera muchas sensibilidades. Yo no pido que haya unidad pero que quien venga a dirigirlo, trabaje y se parta la cara por el club. Dentro de nuestras prioridades vitales no entra el seguir al frente del club. Hemos hecho el trabajo lo mejor que hemos podido», añadió el presidente rojiblanco.