La maltrecha economía marca el destino de Parras

Paz Fernández

El culebrón se promete largo. La gestora del Zamora CF no pudo comunicar ayer al director deportivo la decisión que tomaron en la reunión del lunes sobre su futuro, aunque sí es una realidad que no tiene nada que ver con el expediente disciplinario que se le abrió en diciembre, con la posterior amonestación por escrito, sino con la situación económica que atraviesa la entidad, que no es precisamente boyante. No obstante, y aunque todo sea muy evidente a tenor de todo lo vivido, los gestores se mantienen firmes en su idea de no hacer pública su postura hasta que el principal interesado la conozca, algo que ayer no fue posible, a pesar de que lo intentaron, según ellos mismo relataron. «Él (por Alberto Parras) tenía que estar en el Ruta de la Plata a las doce para entregar un informe que se le requirió sobre el equipo filial y el Nacional Juvenil, y lo hizo. Sin embargo, después se le enviaron tres mensajes por el teléfono para que estuviera a las 13.30 horas en el estadio, porque a esa hora iba a llegar el burofax, pero no debía tener el teléfono operativo porque no lo vio y no fue posible comunicarle nuestra decisión», indicaron. Llegados a esta situación, lo cierto es que el secretario técnico no conoce la resolución sobre su futuro, y durante la jornada de hoy se le volverá a enviar el informe, aunque en esta ocasión se dará por entregado.

Comienza así un nuevo capítulo de una historia que parece no tener fin y es que desde la parte del director deportivo, su abogado aseguró ayer a LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA que está convencido de que «se trata de una carta de despido, a la vista de todo lo que ha ocurrido en los últimos tiempo», un pensamiento que, por cierto, también está en la calle. Lo que sí apuntó el letrado es que «si se trata finalmente de un despido, nosotros vamos a acudir a la justicia. Nuestra idea es intentar negociar pero si no es posible, iremos por las vías jurídicas que existen para estos casos». La primera citación entre las partes será 5 de febrero en un acto de conciliación previo al juicio, aunque en esta ocasión el director deportivo pide que se le retire la amonestación realizada por lo que los gestores consideran «extralimitarse en sus funciones». De forma paralela a esta actualidad está la deportiva, y es que se sigue intentando la llegada de jugadores que refuercen la primera plantilla, pero estos no llegan. Al menos así lo aseguró ayer el entrenador, Roberto Aguirre quien aseguró que en estos momentos «todavía no tenemos nada concreto».

También están a la expectativa para que les llegue el dinero de un nuevo patrocinador que, tal y como anunció este periódico, permitirá pagar una de las mensualidades que se adeuda a plantilla, trabajadores y cuerpo técnico.

La plantilla rojiblanca vivió ayer una nueva sesión de entrenamientos de cara al encuentro de este sábado ante el Real Madrid C. Los jugadores estuvieron en el anexo y, después de la primera toma de contacto del martes, los hombres con molestias físicas van mejorando. Así, Edu Payá ya pudo trabajar al mismo ritmo que sus compañeros, mientras que Dani Hernández y Sergio García se ejercitaron aparte, aunque nadie duda que puedan llegar al encuentro de Liga. Además, el entrenador del primer equipo anunció ayer el nombre de los canteranos que hoy seguirán entrenándose con él y que casi con total seguridad estarán convocados para medirse a los blancos; Cristian y Javi Ramos.

El resto trabajará con el filial de Regional de Aficionados, salvo que haya nuevos cambios en la situación de la enfermería.

El partido contra el Real Avilés del pasado domingo podría tener más consecuencias de las que se preveían. Al parecer, un jugador del equipo asturiano sufre paperas, enfermedad que le fue diagnosticada en el día de ayer y contagiosa. Las paperas, según parece, tienen un periodo de incubación de quince días, por lo que habrá que esperar a saber si algún rojiblanco ha podido contagiarse.

Desde la entidad avilesina informaron al Zamora CF de esta situación por si quieren tomar medidas de precaución.