ZAMORA C.F. - HEMEROTECA

La permanencia, punto a punto

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  El Zamora C. F., con un gran Sergio Sánchez, sale con un buen botín (0-0) de Lezama tras estar casi todo el duelo defendiendo a un brillante Bilbao Athletic 

15.04.2012 | 11:04
Bilbao Ath.
Serantes Ramalho, Albizua, Bustinza, Saborit Eraso, Galarreta, Eguaras Eizmendi, Jonxa, Yurrebaso
Cambios: Se retira Galarreta, entra Goti (min.57) Se retira Bustinza, entra Medina (min.65) Se retira Eizmendi, entra Guillermo (min73)
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Zamora C.F.
Sergio Sánchez, Dani Mateos, Garretas, Manu Arias, Prada, Juanra, Josete, Trigo, Miguel Santos, Jorge y Jairo
Cambios: Se retira Santos, entra Hugo (min.50) Se retira Manu Arias, entras Nacho Matador (min.71) Se retira Jorge, entra Dani (min.77)
Árbitro: Dirigió el partido el colegiado Sauleda Torrente, asistido en las bandas por Casas Podadera y Pérez Bueno. Amonestó a los zamoranos Josete y Hugo
Incidencias: Partido disputado en las instalaciones de «Lezama» ante poco más de quinientos espectadores. Duelo televisado a través de la cadena autonómica.

Ángel García
De nuevo un partido poco vistoso del Zamora a domicilio. Los pupilos de Roberto Aguirre empataron a cero tantos ante el Bilbao Athletic en un choque en el que apenas aparecieron en labores ofensivos. Eso sí, el trabajo defensivo volvió a ser destacable y de ahí que el choque solo pudiera acabar de una forma, con empate a cero.
Por cuarto partido consecutivo fuera de casa, el Zamora fue incapaz de encontrar opciones arriba y después de no anotar ni en Eibar ni en Palencia, y hacer un único tanto ante la ya casi descendida Segoviana, ayer los rojiblancos volvieron a regresar de vació a la capital del Duero en cuanto a goles a favor se refiere.
Eso sí, al menos trajeron un punto gracias al gran trabajo defensivo realizado. Y es que si algo tiene claro Roberto Aguirre es que su equipo tiene que ser muy fuerte en la retaguardia para crecer a partir de eso. Quizás, ayer, esa táctica de anteponer la defensa al ataque tenía una razón de ser de peso. Los zamoranos llegaban al duelo después de jugar dos encuentros en cinco días y había que economizar esfuerzos. No se podía apostar por un duelo abierto, a tumba abierta. Porque el Bilbao B es un conjunto joven, con muchos recursos y sobre todo con mucha rapidez. Por eso, descartada la opción de jugarle de tú a tú al filial vasco, el Zamora decidió salir al terreno de juego con la idea clara de dejar su portería a cero. Si eso, después, podía encaminarse hacia una victoria a través de un contragolpe, mejor.
Esa contra nunca llegó, pero tampoco llegó, afortunadamente, ninguna diana del Athletic B. Sergio lo evitó hasta en cinco ocasiones y los rojiblancos se fueron satisfechos con un punto que ya les coloca con cuarenta y seis en la tabla.

El Zamora salió con las ideas muy claras de inicio. La filosofía era prácticamente la misma que en el partido de ida. El balón lo monopolizó durante el primer acto el Bilbao Athletic, mientras que el Zamora Club de Fútbol se limitaba a defender, más o menos, en el centro del campo. A partir de ahí, los de Roberto Aguirre ya apretaban en la presión. Pero los recursos de los cachorros salían a relucir en cada acción. En balón largo buscando la espalda, entre líneas por el centro del campo o entrando por las bandas. Las tres opciones estaban siendo bien controladas por los del Cuco Ziganda. Cuando los zamoranos cortaban la arteria de las bandas, el peligro venía por el centro. Y cuando los defensas se confiaban, el peligro llegaba en cambios de orientación a la espalda de los zagueros. Pese a mostrar todo el abanico de recursos, los vizcaínos no acababan de crear peligro en los primeros minutos del choque.
No fue hasta el ecuador de este primer acto cuando las ocasiones empezaron a aparecer. Y desgraciadamente para el Zamora, todas caían del lado bilbaíno. Una falta lateral que sacó Sergio en el último suspiro, un mano a mano que también desbarató el cancerbero y un remate en el corazón del área tras un rechace, fueron los tres disparos entre palos de los que dispuso el cuadro de Ziganda. En las tres ocasiones, Sergio Sánchez estuvo providencial, acentuando el buen trabajo en la línea de defensa y portería que tuvo el Zamora.
Y es que todos los jugadores estuvieron pletóricos en esa faceta de retaguardia. El Zamora estuvo inteligente en la presión, economizando esfuerzos y chocando cuando era necesario. Pese a ello, llegaron esas tres buenas ocasiones del rival, fruto de su talento y versatilidad.
El contrapunto a todo esto fue la escasa presencia en ataque. Los de Roberto Aguirre no dispusieron de una sola ocasión arriba. Ni un solo disparo a puerta acentuaba ese problema en el ataque. Un ataque algo huérfano sin la presencia del máximo artillero del Zamora, el andaluz Jona. Juanra, Santos, Jairo y Jorge trataban de darle movilidad al equipo arriba en posibles contragolpes, pero la espigada, joven y rápida defensa local lo impedía.
Así, terminaba la primera parte con empate a cero en el marcador. Sin duda, lo mejor que le podía pasar al Zamora Club de Fútbol tras los primeros cuarenta y cinco minutos.
Tras el asueto, Roberto Aguirre decidió seguir contando con el mismo once inicial y en los primeros minutos volvió a sufrir el conjunto zamorano. En la primera jugada de ataque, el filial vasco contó de nuevo con una ocasión muy clara para ponerse en franquía. Saborit se encontró con un balón filtrado en el área y encaró a Sergio Sánchez. De nuevo, el meta estuvo bien colocado y atento y abortó esa jugada peligrosa.
El inicio de este segundo acto era de nuevo una declaración de intenciones. Los dos entrenadores habían redundado en lo mismo durante el descanso y las dos escuadras iban a jugar a lo mismo que jugaron en el primer acto.
Así, el Bilbao B llegó de nuevo a tener un setenta por ciento de posesión durante los segundos cuarenta y cinco minutos y fue el conjunto que más ocasiones tuvo. Afortunadamente, una tras otras, las jugadas fueron muriendo bien en la defensa del Zamora o bien en las manos de Sergio Sánchez, que se mostró muy seguro durante toda la tarde.
Roberto Aguirre decidió mover el banquillo. Los jugadores estaban acusando el cansancio acumulado de los últimos encuentros y también el desgaste que siempre conlleva correr detrás del balón durante noventa minutos. Hugo Aguado era el primero en salta al campo, y posteriormente sería Nacho Matador el que salió en lugar de Manu Arias, para ofrecer al equipo algo más de presencia en la parcela ancha.
Con estos cambios, y sobre todo con el cambio de dibujo del Bilbao Athletic (pasó al 3-4-3), el duelo empezó a ser trepidante. Los locales fueron a por el triunfo de manera más descarada aún y eso facilitó a que el Zamora encontrase algún hueco en la zaga vasca.
Pero esos huecos no se aprovecharon del todo bien. Ni siquiera la salida de Dani Hernández ayudaron a eso. Un par de saques de esquina y sendos disparos de Hugo Aguado y de Alberto Prada fueron el pobre balance del Zamora Club de Fútbol en la parcela atacante.
Mientras, el Bilbao B seguía a lo suyo. Los «cachorros» gozaron de otra ocasión muy clara antes de afrontar una recta final en la que embotellaron al Zamora.
Un tramo final en el que los visitantes tuvieron en Sergio Sánchez al mejor aliado. Eso sí, arropado por todo el equipo que apretó los dientes para sacar fortaleza de la nada y sumar un empate a cero que supo bien a la expedición de la capital del Duero. Fue una recta final en la que casi nadie atacaba y en la que todos defendían. El mejor ejemplo, los dos despejes de cabeza que tuvo que hacer Jairo en el área propia en los dos últimos cueros colgados por el Athletic B.
Al final, un empate a cero que ayuda al Zamora a colocarse con cuarenta y seis puntos, dejar otra semana más la portería a cero y dejar la permanencia encarrilada a la espera de lo que ocurra este fin de semana en el Ruta de la Plata.